Guía para principiantes

Al inicio de la clase, todos los participantes nos colocamos en círculo, y dejamos el shinai en el suelo adoptando la posición de sonkyo. Para ello: 

• coge tu shinai con la mano izquierda y apóyalo sobre la cadera. 
• Da tres pasos hacia delante, empezando con el pie derecho
• Desenfunda el shinai y déjalo en el suelo pasando por la posición de sonkyo. En este vídeo puedes ver cómo realizar esta postura tanto con shinai como sin él: 

A continuación se realizan diferentes ejercicios para calentar; la persona que dirige el calentamiento lleva el ritmo contando, y los demás le siguen. No te preocupes, ¡es fácil de entender! Este es el orden y los números en japonés: 

Ichi – ni (1-2) (persona que lleva el calentamiento)

san – shi (3-4) (resto de la clase)

go – roku (5-6) (persona que lleva el calentamiento)

sichi – hachi (7-8) (resto de la clase)

Jogeburi

Jogeburi es un suburi muy amplio en el que el shinai hace un arco desde detrás de la cabeza hasta casi tocar el suelo. El objetivo principal es calentar los principales grupos musculares al tiempo que trabajamos el corte recto, la posición de las muñecas y de los pies. Puedes verlo paso a paso aquí: https://www.youtube.com/watch?v=xCNtH0vcfq8&t=71s

Nanameburi

Este suburi es como el anterior solo que el corte, en lugar de ser recto, se realiza en diagonal.

Men – Sayumen

Este ejercicio consiste en cortar men recto, a la altura de la cabeza, hacia delante y hacia atrás. Al contar damos un paso, y cada paso se corresponde con un corte:  un paso con corte hacia delante, un paso con corte hacia detrás. Durante este ejercicio, todos contamos a la vez.

Después, se repite el mismo ejercicio pero con el corte sayumen, o corte en diagonal: es un corte que, en lugar de golpear en el centro de la cabeza, lo hace en los laterales, a unos 45 º. 

Haya suburi

El nombre de este ejercicio significa, literalmente “suburi rápido”. Al hacer haya suburi los dos pies se mueven hacia delante y hacia atrás. Al ir hacia delante cortamos con el shinai,, y al ir hacia atrás cargamos la espada por encima de nuestra cabeza. Puede ser un poco complejo al principio, ¡pero ya verás que es solo cuestión de práctica y de ritmo! En este vídeo puedes ver cómo realizarlo paso a paso: https://www.youtube.com/watch?v=8UhOnt7ZPL4

Si te has decidido a probar el kendo, hay algo que debes saber: el dojo no es simplemente un lugar para entrenar. Es el lugar donde se aprende el camino de la espada y, por tanto, hay ciertas normas de comportamiento que tienes que aprender cuanto antes. Es lo que se conoce como reigi-saho y consiste, básicamente, en ser respetuosos. 

Después del calentamiento llega el momento del shugo (reunión): el sensei o el senpai dará la voz de seiretsu ( 整列) y verás que todos tus compañeros corren para ponerse en fila, en una línea recta. Esta alineación se hace por grado de antigüedad, así que tú, como principiante, deberás ponerte al final de todo: normalmente, en el lado más cercano a la entrada del dojo. A continuación oirás la palabra chakuza, una voz para sentarse en una posición muy concreta. Para realizarla:

• Alinéate con tu compañero de la derecha, de manera que tu hombro derecho esté en línea con su hombro izquierdo.
• Baja tu pierna izquierda hacia el suelo, colocándola junto al talón de tu pierna derecha.
• Baja también la pierna derecha y coloca los pies juntos, con el empeine totalmente apoyado sobre el suelo (no apoyando el peso sobre los dedos).
• Coloca las manos sobre los muslos, mirando hacia el frente. Al colocar el shinai o el bokken en el suelo, procura no hacer ruido.

Una vez en esta posición oirás la voz de seiza (正坐 )5 una llamada a la meditación en la que deberás colocar las manos sobre tu regazo, con las yemas de las manos tocándose entre sí y los pulgares juntos. Recuerda que los pulgares no deben formar un valle (estar hundidos) ni una montaña (estar levantados), sino que deben estar totalmente horizontales. Al final de la meditación oirás yame, que indica el fin de este estado de concentración.

A continuación, se dan diferentes agradecimientos. Al inicio de la clase por este orden:

• Shomen ni rei. Saludo al shomen, que es el punto más importante del dojo. Aquí es donde se encuentra (o se debería encontrar) el kamidana o santuario sintoísta (en general se orienta hacia el norte).
• Sensei ni rei. Se trata de un saludo a los sensei. Responde con un onegai shimasu.
• Otagai ni rei. Es el saludo a los compañeros. Responde, también, con un onegai shimasu.

Al final de la clase, estas voces seguirán el orden inverso:

• • Otagai ni rei. Responde con un arigatou gozaimasu.
  • Sensei ni rei. Responde con un arigatou gozaimasu.
  • Shomen ni rei. ¡No digas nada!

En el momento de ponerse o quitarse la armadura, tus compañeros se pondrán (o se quitarán) el men, bajo la voz de men tsuke al principio o men tore al final.

Las voces de onegai shimasu y arigatou gozaimasu las usarás muchas más veces a lo largo de cada clase: antes de practicar con cada compañero dirás onegai shimasu haciendo una reverencia, y le dirás arigatou gozaimasu junto con otra reverencia después de practicar. Onegai shimasu podría traducirse como “practica conmigo, por favor”, e indica una buena predisposición a aprender todo lo que tu compañero pueda enseñarte. Arigatou gozaimasu es la manera de agradecer a cada compañero que haya practicado contigo.

Y estas reverencias, ¿cómo deben ser? Pues te diremos que hay dos tipos: la que realizas con tus compañeros y la que realizas con los sensei. Debes mantener la espalda recta y, en el primer caso, inclinarla hasta 15º manteniendo la mirada en los ojos de la otra persona; en el segundo caso, inclínate hasta los 30º.

Aparte de todo esto, hay otras normas básicas que tienes que recordar mientras estés en el dojo, y todas tienen que ver con tu actitud:

• No te apoyes en la pared, columnas, espalderas o cualquier otro elemento que haya en el dojo.
• No te tumbes en el suelo ni te sientes en ninguna posición irrespetuosa: o en seiza o con las piernas cruzadas (se admite la posición de loto o medio loto en caso de presentar lesiones en las extremidades inferiores o cuando el sensei se dirige a los demás por un tiempo prolongado).
• No hables durante la clase. Si tienes una pregunta, levanta la mano y espera a que te respondan.
• No puedes salir o entrar de la rotación a tu libre albedrío: pide permiso levantando la mano tanto para entrar como para salir.

Ten en cuenta, aun así, que cada dojo tiene sus propias normas internas, así que es muy importante que en tu primera clase de kendo te informes adecuadamente sobre los comportamientos no aceptados en tu dojo para memorizarlos lo antes posible.

Otro tema importante que aprenderás en tu primera clase es que debes tratar el shinai con respeto, como si de una espada se tratara. Al fin y al cabo, la katana era el alma de los samurái y el shinai, como simulación de una katana, debe ser tratado con el mismo respeto; de hecho, se le considera una extensión del propio cuerpo. Por tanto, desde el primer día tienes que entender que no puedes:

• Pasar por encima de tu shinai o el de tus compañeros
• Apoyar la punta del shinai (sakigawa) en el suelo
• Empujarlo, patearlo, lanzarlo…

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Aunque la estructura de la clase es bastante regular, los ejercicios que practicamos varían en cada entreno. 

Antes del primer ejercicio, deberás saludar a tu compañero diciendo onegai shimasu y haciendo el saludo tal como te hemos explicado antes: colocando el shinai sobre tu cadera izquierda, dando tres pasos y adoptando la posición de sonkyo. Al levantarte, te colocarás en kamae o posición de guardia. 

Al final de cada ejercicio, la persona que dirige la clase dirá cambio o kotai: la rotación puede variar en función del número de personas que haya en clase o del nivel que tengan los asistentes de ese día. Sea como sea, en los siguientes ejercicios ya no tendrás que saludar haciendo sonkyo: bastará con decir onegai shimasu al principio y arigato gozaimasu al final.

En cada clase realizarás diferentes ejercicios para corregir tu postura, aprender a cortar y a desplazarte: en cada momento tendrás a un senpai explicándote lo que necesitas saber y, al final de cada entreno, podrás hacer las preguntas que quieras. 

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